Cómo últimamente estoy un poco vago con las reviews, voy a hacer una rapidita…. Olivia vuelve a ser nuestra Olivia, por obra y gracia del Cortexiphan. La agente Dunham se tira todo el episodio más caliente que una estufa y parece que va a violar a Peter sólo con la mirada.
Peter tarda todo un capítulo en dejarse conquistar por esta nueva/vieja Olivia. El papel de Peterfantas en Fringe, siempre me ha parecido que es el que en otras series, está destinado a la chica protagonista. Olivia siempre lleva la iniciativa, salvo cuando al hijo del doctor Bishop le da por derribar puertas.
Y cuando después de tres meses, parece que Peter perderá la virginidad… van y secuestran a Olivia. ¿Quién habrá sido? En este episodio todavía no se sabe, pero tiene toda la pinta que ha sido David Robert Jones. ¿Y para que la necesita? Seguramente para volver a jugar al juego de apagar bombillitas. En la primera temporada decía que la tenía que preparar para ser un soldado. Pero… ¿para que guerra? Cómo no sea la que él mismo va a montar con todo el pifostio que ha armado últimamente.
Bueno… también han secuestrado a Nina. Parece que al final no era mala y la realidad es que ha sido sustituida por un cambiaformas. Lo que no entiendo, es cómo habrá hecho el cambiaformas para imitar ese brazo tan extraño que tiene la vieja peluca. ¿Se lo habrá cortado también? Aunque el brazo de Nina no está amputado, sino entre dos mundos. Aunque puede ser que la Nina mala no sea un cambiaformas, sino versión alternativa malvada de universo rojo.
Antes de todo esto, la División Fringe ha estado trabajando en un caso de un chico que oía voces de gente cometiendo homicidios. Al final lo resuelven… más o menos, porque aún les quedan por detener unos doscientos sospechosos y es que a un hombre le ha dado por tener doscientos hijos con poderes de abeja. Del caso no voy a comentar nada más, porque si parece que a Olivia y Peter les importa una mierda, yo no voy a ser menos.